En el siguiente post podrás conocer qué actividades forman parte del trabajo diario de un documentalista audiovisual en una cadena de televisión.
Si me lo permitís comenzaré explicando la finalidad de su trabajo.
Y es que el desempeño de sus tareas tiene como único fin “la preservación y difusión” de la información contenida en los archivos audiovisuales que gestiona.
¿Qué tareas son estas?
Las actividades que practica un documentalista audiovisual se integran dentro de las fases habituales del proceso documental: selección, registro, análisis, recuperación y difusión.
Vamos a ver en qué consisten y qué las hace diferentes:
Selección
En esta etapa se determina que documentos son relevantes para la organización y se seleccionan para su almacenamiento y gestión.
Os pongo un ejemplo, el material audiovisual procedente de las grabaciones de un evento cubierto por la cadena de televisión puede derivar en decenas de archivos audiovisuales con información muy parecida.
En este caso, sería función del documentalista seleccionar las imágenes que considera de mayor calidad a nivel técnico pensando siempre en su utilidad e importancia.
Algunas instituciones disponen de archivos intermedios que permite mantener durante un espacio de tiempo determinado algunos de sus contenidos antes de decidir sobre su expurgo.
Registro
Se trata de la identificación de los materiales seleccionados mediante la asignación de un número de registro único o ID.
A nivel de contenido en esta fase se lleva a cabo la asignación de metadatos esenciales para la identificación del archivo como: título, fecha del evento o resumen de la información.
También se realiza una indexación básica que consistiría en asignar descriptores de Personas donde se nombran a las personas que aparecen en las imágenes; Lugares donde indicar la ubicación donde se producen los acontecimientos o; Temas donde recoger a qué se refieren las imágenes que se tratan.
Análisis
En esta etapa el documentalista analiza la información de las imágenes determinando la información relevante.
En el ámbito de la documentación audiovisual se analiza la información de las imágenes describiendo todo lo que vemos minuto a minuto, a este tipo de trabajo lo conocemos coloquialmente como “visionado”.
Se trata de describir las imágenes de manera lo más completa posible, especificando que pasa, quién aparece, donde se produce, además del tipo de plano referido. Un trabajo minucioso que supone la mayor carga de trabajo para el documentalista audiovisual.
El análisis documental finaliza con la asignación de los descriptores documentales necesarios.
Y es que, aunque en el registro se asignasen algunos datos básicos útiles para su recuperación, no será hasta después del visionado que el documentalista esta capacitado para asignar todas las palabras clave consideradas necesarias para facilitar la accesibilidad de está información.
Recuperación y Difusión
En esta fase se lleva a cabo la búsqueda y recuperación de la información contenida en los archivos audiovisuales analizados.
En el ámbito de una televisión es habitual que los redactores acudan al Servicio de Documentación para recuperar imágenes concretas para elaborar su información.
Uno de los fines últimos del servicio, la difusión de la información.
Conclusión
El fin último de un documentalista audiovisual es hacer accesible el contenido de los archivos que gestiona para que puedan ser utilizados por los usuarios de la institución siempre que lo necesiten.
El papel de los archivos audiovisuales es fundamental para garantizar la salvaguarda y preservación de una parte inestimable de nuestro patrimonio.